Tanto Monserrate como las principales calles de Trujillo, no logran librarse de los tan latosos ambulantes. Muchos de los alcaldes vecinales han librado verdaderas batallas contra ellos, con la finalidad de dejar limpias las calles para que todos los vecinos y universitarios de los alrededores podamos caminar libremente, por avenidas aseadas y ordenadas, Pero lo cierto es que, como si fuera una plaga, solamente no desaparecen, sino que pareciera que van en aumento, los botan de un sitio y aparecen en otro, los botan hoy y mañana ya están espiando un lugar donde se instalarán.
(Leer más)
lunes, 6 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario